Los Micromachismos son prácticas de dominación y violencia masculina en la vida cotidiana, del orden de lo “micro”, de lo capilar, lo casi imperceptible lo que está en los limites de la evidencia.
Pero antes de hablar más sobre este tema,
vamos a conocer el origen de este término y quien habló por primera vez de el.
Luis Bonino, es un psicoterapeuta especialista en varones,
masculinidad y violencia de genero, de nacionalidad argentina y actualmente
afincado en Barcelona, que en el año 1991 dio forma a este concepto para hablar
sobre la micro-violencia que se ejerce hacía la mujer. Desde entonces ha
escrito varios artículos de investigación y de vital importancia sobre este
tema.
Bonino,
decidió incluir también “machismo” al término acuñado, ya que al ser una
palabra de significado ambiguo, alude
en el lenguaje popular, a una connotación negativa de los comportamientos de
inferiorización hacia la mujer, que era lo que quería destacar en el término.
Y en
la pareja pasa a ser mucho mas delicado, cuando se producen esta serie de
situaciones.
1.
Intimidación
2.
Control del dinero
3.
No participación de lo domestico
4.
Invisibilidad
5.
Abuso de la capacidad femenina del
cuidado, entre muchas otras más.
No
sólo en la pareja, los Mm también se encuentran en la publicidad y en la vida
cotidiana, es decir, el Mm se sufre a cada instante, y como está tan
normalizado pasa desapercibido.
En la
publicidad por ej. Es normal (aunque cada vez se introduce el patrón masculino)
ver como en los comerciales de televisión, la mujer ocupa espacios de limpieza,
de ama de casa, madre o esposa perfecta.
Un
ejemplo de ello, es ver como en los aseos públicos, los cambiadores para bebes
siempre se encuentran en el aseo femenino, lo que adjudica a su vez y obliga a
la mujer a ser siempre la encargada de cumplir este rol.
Aseos
públicos del Museo del Prado.
Aquí
vemos como poco a poco se va integrando la igualdad entre mujeres y hombres a
la hora de ejercer su labor de madres y padres.
Todo
esto genera en la mujer un agotamiento de sus reservas emocionales, deterioro
de la autoestima, disminución en su poder personal, malestar difuso,
irritabilidad crónica, debido al sentimiento de culpa que el varón genera y
alimenta para mantener un cierto poder y sobre todo, mantener los privilegios y
comodidades que ellos se han encargado de perpetuar. Esto se viene manteniendo por
años, gracias a un patriarcado que a día de hoy sigue vivo.
RELEVANCIA DEL TEMA
La gran mayoría de personas han sido
criad@s en un patriarcado que ha doblegado a la mujer para que de cierta forma
cumpla un papel determinado como tal.
Se la ha encasillado para hacerla más vulnerable, condicionando sus
capacidades para conseguir objetivos que generan beneficios al género
masculino, poniéndoles en primer lugar a ellos y dejando el propio anulado.
Seguro que todas las mujeres conocen de primera mano situaciones como estas, bien sea por experiencia personal o por
experiencias ajenas, (amigas, conocidas, familiares) lo que ocurre, es que muchas desconocen el
significado de estas acciones o no le saben poner nombre.
De ahí la relevancia de esta tema, que pretende analizar y sensibilizar sobre el micromachismo. Qué es? Cómo se producen?
De que manera lo combatimos?
Desde diferentes ámbitos se ayuda a concienciar y a aportar luz acerca de este tema, como por ejemplo, la
Federación de Mujeres Progresistas que organiza cada año jornadas de Mm, la
asociación de hombres por la igualdad de genero, que están están por toda
España, y el centro de estudios de la condición masculina, que también tiene
sede en Madrid y el director es Luis Bonino, quien es el padre teórico de los
Mm. Así también como diferentes centros de desarrollo como CEPAIM, que tienen proyectos como
Todas las
personas somos agentes de cambio, tanto cuando se imparte un taller o participamos de el, como si
estamos en la calle, por eso todas las personas tenemos agencia para poder
luchar en contra de estos tipos de violencia.
Otra
estrategia para que esto se haga viral es crear grandes feministas, los
hombres también, aunque tengan un poco más de resistencia. Que tanto hombres como mujeres se nombren abogad@s de
la igualdad de oportunidades.
N.D
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